¿Necesitas un abogado experto en Familia?
Consulta con un abogado experto en derecho de Familia de tu zona. Accede a nuestra red de abogados de toda España y contacta con hasta 3 profesionales hoy mismo.
Qué es el divorcio express
El divorcio se encarga de romper el vínculo matrimonial existente entre dos personas, poniendo fin a los derechos y obligaciones entre cónyuges.
La ruptura del vínculo matrimonial se permite en nuestro ordenamiento jurídico desde la entrada en vigor de la Ley del Divorcio de 1981. Lo que ocurría es que esa normativa establecía un proceso largo, complejo y tedioso.
Las personas interesadas en divorciarse tenían que alegar y justificar que había una causa suficiente para acabar con su matrimonio. Además, era necesario que los cónyuges pasaran un mínimo de dos años separados antes de que la autoridad judicial entrara a valorar su divorcio.
Con el procedimiento tal y como estaba regulado, recuperar la soltería resultaba muy complicado si una de las partes se oponía a la voluntad de la otra.
A medida que las rupturas matrimoniales se fueron convirtiendo en algo común y totalmente aceptado por la sociedad, este proceso quedó obsoleto. No tenía sentido poner tantas trabas al deseo de divorciarse y, por eso, se abordó un cambio legal.
La Ley 15/2005, de 8 de julio, modificó el Código Civil y la Ley de Enjuiciamiento Civil en lo referente a la separación y el divorcio, estableciendo un procedimiento mucho más sencillo y rápido, y dando lugar a lo que se conoce como divorcios express, que no son otra cosa que divorcios de mutuo acuerdo.
La principal diferencia con respecto al divorcio tal y como estaba regulado con anterioridad a 2005 es que el proceso puede ser mucho más sencillo y rápido si las partes llegan a un acuerdo.
Regulación del divorcio express en España
El divorcio aparece regulado en el Código Civil dentro del Título IV, dedicado al matrimonio y a la disolución matrimonial.
La Ley 15/2005 produjo un importante cambio en los artículos que regulan esta materia. El Capítulo VIII del Título IV del Código Civil está dedicado a la disolución del matrimonio y en él se habla sobre el divorcio.
El artículo 87 señala que el divorcio se puede dar a petición de uno solo de los cónyuges, de ambos, o de uno con el consentimiento del otro. Mientras que el artículo 88 se refiere al divorcio de mutuo acuerdo, que es el que se conoce como divorcio express en España.
Consecuencias legales del divorcio
De la regulación que hacen tanto el Código Civil como la Ley de Enjuiciamiento Civil sobre este tema se derivan las consecuencias de la ruptura matrimonial por divorcio:
- Disolución del vínculo matrimonial: los excónyuges vuelven a ser solteros y son libres de contraer matrimonio en el futuro. Incluso podrían casarse de nuevo entre sí.
- Fin de los derechos y obligaciones: desde la fecha de la sentencia de divorcio, el matrimonio se considera extinguido y, con él, expiran los derechos y obligaciones entre cónyuges que reconoce el Código Civil. Por ejemplo, la obligación de vivir juntos o de guardarse fidelidad.
- Disolución del régimen económico matrimonial: se liquida el régimen económico matrimonial y se reparten tanto los bienes como las deudas. A partir de ese momento, cada miembro de la expareja es titular y responsable único de sus bienes y obligaciones económicas.
Los efectos jurídicos del divorcio tales como el uso de la vivienda familiar, la custodia de los hijos menores, la pensión de alimentos y la pensión compensatoria (si hay derecho a ella), se estipulan en un convenio regulador. Este es adoptado por acuerdo de las partes y necesita ratificación judicial para surtir efectos legales.
¿Necesitas un abogado experto en Familia?
Consulta con un abogado experto en derecho de Familia de tu zona. Accede a nuestra red de abogados de toda España y contacta con hasta 3 profesionales hoy mismo.
Requisitos del divorcio express
Para poder acceder a esta forma de disolución del matrimonio se exigen los mismos requisitos que cuando se trata de un divorcio contencioso.
Con el paso del tiempo, los cambios legislativos han buscado la simplificación de estos procesos, lo que ha dado lugar a una notable reducción de los requisitos.
La legislación de 1981 era muy exigente en cuanto a causas y plazos. Quien pedía el divorcio tenía que alegar y acreditar que se daba alguna de las razones recogidas en el Código Civil para la separación:
- Abandono injustificado del hogar.
- Infidelidad.
- Conducta injuriosa o vejatoria.
- Violación grave o reiterada de los deberes conyugales o de los deberes respecto a los hijos comunes.
- Condena a una pena de privación de libertad por un tiempo superior a seis años.
- Alcoholismo, toxicomanía o perturbaciones mentales.
- Cese de la convivencia conyugal libremente consentida durante un tiempo mínimo de seis meses.
- Cese efectivo de la convivencia conyugal durante el plazo de tres años.
Si se daba alguna de estas causas, se podía acceder a la separación legal, situación en la que había que pasar un mínimo de dos años para poder pedir después el divorcio.
En cambio, ahora los requisitos son mucho más sencillos:
Plazo
Se puede pedir el divorcio pasados tres meses desde la fecha de celebración del matrimonio. En caso de que exista riesgo para la seguridad de uno de los cónyuges o de los hijos, ni tan siquiera es necesario esperar esos 90 días, se puede acudir antes a los tribunales.
Voluntariedad
No se exige en ningún caso que sea necesario que los dos cónyuges estén de acuerdo en romper el matrimonio. Con que uno de ellos quiera divorciarse, es más que suficiente para que el proceso se ponga en marcha y finalice con la disolución del vínculo matrimonial.
Ausencia de causas
Contraer matrimonio es una decisión totalmente libre y la regulación actual del divorcio parte de que disolver la pareja también debería serlo. Por eso, ya no existen las causas de divorcio.
Quien desea divorciarse no tiene que alegar ante los tribunales ninguna causa para ello. Solo tiene que solicitar el divorcio.
Sin necesidad de separación previa
La figura de la separación legal continúa existiendo en el ordenamiento jurídico español, pero ya no es un paso previo necesario para poder acceder después al divorcio.
Las parejas pueden presentar directamente su demanda de divorcio y conseguir que el juez ponga fin a su matrimonio sin haber tenido que pasar por un tiempo de separación.
Cuánto tarda el divorcio express
Cuando se trata de cuánto tarda un divorcio express, los plazos nunca son exactos, porque dependen del volumen de trabajo que tenga el juzgado competente. De media, una vez presentada la demanda, se tarda de uno a tres meses para llevar a cabo la ratificación.
Una vez que los cónyuges confirman ante la autoridad judicial su decisión de divorciarse, este tarda más o menos un mes en dictar la sentencia.
En el caso de parejas que no tengan hijos menores o incapacitados, pueden optar por la vía del divorcio express ante notario. La ventaja de este procedimiento es que es más rápido y permite solucionar los trámites en apenas unas semanas.
Más allá de lo que pueden tardar los juzgados, hay que tener en cuenta que el proceso puede dilatarse si las partes no consiguen alcanzar un acuerdo para dejarlo reflejado en el convenio regulador. Por tanto, cuanta mejor disposición haya para negociar, más rápido irá todo.
¿Necesitas un abogado experto en Familia?
Consulta con un abogado experto en derecho de Familia de tu zona. Accede a nuestra red de abogados de toda España y contacta con hasta 3 profesionales hoy mismo.
Cómo se lleva a cabo un divorcio express
Esta modalidad de divorcio más rápida y sencilla que el procedimiento contencioso gira en torno al convenio regulador. Además, como ya hemos explicado, puede darse ante notario o ante el juzgado.
Convenio regulador
Los cónyuges, asistidos por un especialista legal, deben ser capaces de plasmar por escrito un acuerdo que regule los efectos derivados de su divorcio. Este documento va a tratar temas esenciales como:
- Custodia y régimen de visitas de los hijos menores.
- Pensión alimenticia para los hijos.
- Pensión compensatoria, solo si uno de los cónyuges sufre un importante desequilibrio económico como consecuencia de la ruptura de la relación.
- Uso de la vivienda familiar.
- Liquidación del régimen económico matrimonial.
Aunque rige el principio de libertad de pactos, es importante que el convenio sea equitativo. De manera que no genere una notable desigualdad con respecto a las partes. Además, si se trata de un divorcio express con hijos menores o dependientes, será revisado por el Ministerio Fiscal con el objetivo de salvaguardar los derechos de estos.
Alcanzado el acuerdo, se recoge por escrito y lo firman ambas partes. Por lo que respecta a la asistencia letrada en esta fase, cada cónyuge puede tener su propio abogado o pueden compartirlo.
Divorcio express ante letrado de la Administración de Justicia
Si los cónyuges optan por seguir esta vía, deben presentar una demanda conjunta de divorcio en el juzgado competente por razón del domicilio.
A la demanda se acompaña la propuesta de convenio, que será revisada por el Ministerio Fiscal si hay menores y, en todo caso, por el letrado de la Administración de Justicia.
Se cita a las partes para que acudan al juzgado a ratificar que están de acuerdo con el contenido del convenio. Así, se deja constancia de que el documento se ha firmado de forma libre y sin ningún tipo de coacción.
Finalizado este trámite, el letrado dicta decreto pronunciándose sobre el convenio regulador y declarando el divorcio.
Divorcio express ante notario
Si la pareja no tiene hijos menores o dependientes, puede optar por gestionar su divorcio ante notario. En este caso, se firma el convenio regulador ante el notario para ratificarlo y luego se formaliza el divorcio en escritura pública.
Ventajas del divorcio express
Las parejas pueden romper su matrimonio por los cauces del divorcio de mutuo acuerdo o express o siguiendo los trámites del divorcio contencioso. La legislación permite las dos opciones, pero en la práctica la mayoría escogen el mutuo acuerdo porque tiene una serie de ventajas:
- Rapidez: los trámites legales son mucho más sencillos y rápidos que en un divorcio contencioso. En un plazo de más o menos tres meses puede estar solucionado, mientras que un procedimiento contencioso puede alargarse más de un año.
- Simplicidad: uno de los rasgos de este procedimiento es que todo se simplifica al máximo. Además, si no hay hijos menores o dependientes, se puede resolver directamente ante notario, sin necesidad de pasar por los tribunales.
- Menor coste económico: el acuerdo entre las partes permite hacer la tramitación contando ambas con el mismo abogado y procurador, lo que supone un importante ahorro en comparación con un procedimiento litigioso.
- Menor desgaste emocional: la rapidez, la sencillez y la disposición de los implicados a llegar a un acuerdo consigue que el desgaste emocional sea menor. Esta solución amistosa no solo es buena para la ex pareja, también para sus hijos.
- Control sobre los efectos del divorcio: en una ruptura matrimonial contenciosa, es el juez el que acaba tomando la decisión sobre los efectos que van a regir las consecuencias del divorcio. En cambio, en el mutuo acuerdo, son los implicados los que regulan esos efectos a través del convenio.
- Practicidad: las cuestiones económicas están entre las más importantes a tratar en un divorcio. Si se opta por la vía contenciosa, pueden pasar muchos meses hasta que se acuerde la liquidación del régimen económico matrimonial, lo que podría dar lugar a problemas. En cambio, en el divorcio express todo es mucho más rápido, lo que evita tensiones adicionales por temas de dinero.
¿Necesitas un abogado experto en Familia?
Consulta con un abogado experto en derecho de Familia de tu zona. Accede a nuestra red de abogados de toda España y contacta con hasta 3 profesionales hoy mismo.